Esta situación tuvo un deja vu en la edición del Bailando 2017, cuando Sofía fue propuesta para acompañar en el ritmo de cuarteto a Melina Lezcano y ésta la rechazó al enterarse de la disputa con Pampita, sumando así el nombre de la cantante de Agapornis a su larga lista de personas no gratas.
Y cómo olvidar la tensa y nunca admitida falta de relación con quien fuera su compañera de tapa de la revista Gente, esa tapa que lanzó ambas hacia una carrera rutilante. Su contrafigura cromática, nada menos que Karina Jelinek, quien luego de muchos años rompió el silencio y confesó que "al menos ahora me saluda", tras deslizar que Sofía había maniobrado para que la infartante morocha fuese expulsada de un camarín que compartían.
Como si esto no fuera suficiente, las redactoras de la revista Pronto salieron a probarse algunos vestidos de la línea que Sofia vende y...bueno, se podría decir que no les gustó la colección, y como en materia de gustos todo es opinable allí se agotaría el tema. Pero calificaron a su ropa de "berreta", y difícilmente Sofía les mande invitaciones para su cumpleaños y mucho menos para que se den un chapuzón en su pileta.